domingo, 4 de octubre de 2009

john trumbo


preparando una conferencia sobre escritores underground y poetas del rock abrí mis carpetas sobre los beat, carpetas que hace años permanecían cerradas. entre muchas cartas, revistas y fotocopias casi ilegibles encontré una carta de john trumbo fechada el 5 de abril de 1984.

conocí a john en la primeavera de 1983, creo que me lo presentaron rafa y emma, unos amigos de valencia que tenían una escuela de yoga. conectamos rapidamente porque en aquellos años, john con 31 años y yo con 24, estábamos locos por conocer y desarrollar todo aquel universo literario y vital de los poetas beat. john trumbo fue la primera persona que conocí que habia tenido contacto con allen ginsberg, fue también john quien me dió a conocer el instituto naropa en boulder, colorado, un lugar donde el gurú beat impartía clases y al que intenté viajar sin mucha suerte. todavía conservo la carta donde sissy onet a petición de ginsberg me enviaba las condiciones de mi alojamiento y algunos consejos para trabajar en las instalaciones del instituto y ayudarme así con los gastos de una estancia que nunca llegó a darse.

durante su estancia en valencia, meses antes, habíamos compartido noches de largas conversaciones, música y poesía, a john le encantaba el campo y por aquel entonces yo tenía acceso a una casa solariega de mi abuela en mitad de un pequeño bosque y cerca de un río, un lugar idílico en requena, un pueblo entonces a una hora de valencia, donde john estuvo alojado durante un buen tiempo dedicado a lo que más amaba: escribir, estar en contacto con la naturaleza y practicar yoga.

john fue también la primera persona que intentó enseñarme yoga, me río al recordarme intentando adoptar las posturas que él con toda la paciencia del mundo intentaba que yo aprendiera. al cabo de unos meses john regreso a estados unidos y nos cruzamos algunas cartas.

no supe nada más de john desde aquella primavera de 1984, hasta que buscando en internet supe que había fallecido en abril de 2008. en su última carta john me proponía editar unos poemas suyos que tenía traducidos y que formarían parte de mi modesta y joven editorial, tampoco aquel libro vió nunca la luz.

leo que llegó a dedicarse finalmente a la poesía y que pasó sus últimos tres años en el area de north beach en san francisco, asiduo cliente del café trieste donde frecuentó a buen seguro con amigos y poetas que siempre había admirado. no conservo ningún poema de john pero vi un fragmento en una de sus páginas que dejo aquí como pequeño homenaje a un hombre bueno con el que compartí momentos que ahora son dulces de recordar.

buen viaje john, hasta siempre



"Silent Seed"

I even found myself
questioning calling myself a Quaker
as by doing so
it automatically set one apart
from other religions and traditions
why not simply human being?
then there are no distinctions or divisions
and I still am in a quandry
as to what to say I am
human being subset Quaker?
what of a dash of Zen that I like so much?
shall I leave out Roman Catholicism
shaking hands at the end of mass
just as we Quakers do at rise of meeting?
yet I come back to the multicolored tents of Quakerism
as it is a tradition that encourages
all forms of seeking so maybe Quaker is another
word for human being